Julia Teran, Tallando la Piedra
Era un día de esos, en los que vamos de un
lugar a otro, buscando los mejores encuadres que perpetuar, historias que
contar y anécdotas para recordar.
Al pasar por Huambocancha era imposible no
visitar su cementerio y conversar con algún artesano dedicado a pulir y dar
forma a la piedra. Con ése requerimiento, el taxista nos llevo hasta el taller
de una de las hijas de Alejandro Terán. Julia, de 40 años, quien se ha dedicado
a tallar la piedra desde los 10. Ella, deja a un lado una de las piezas que
estaba puliendo para recibirnos. Se emociona al ver que su trabajo es
reconocido, nos cuenta que se dedica a hacer adornos pequeños y trabaja mucho
mejor la marmolina que el granito.
Julia Teran, Talla Marmolina y Granito
Antes de nuestra llegada, Julia Terán Infante
no tenía idea de nosotros, no pasaba por su cabeza que iríamos a visitarla sin
avisar. Nunca nos había visto, no somos sus clientes habituales, no hemos
venido sólo a comprar, queremos que nos cuente sobre su trabajo, sobre como se
gana la vida y el porque está en éste rubro de picar piedras, una labor que
más se le atribuye a los hombres, por la rudeza que aparenta.
“Mi padre nos enseñó éste oficio y a él le
enseñó su padre”. Nos comenta. Ahora
ella trabaja junto a sus dos hijos, trasmitiendo el arte aprendido de
generación en generación. Los joyeros son su fuerte y también lo que más
compran los turistas, que se detienen antes o después de visitar la Granja
Porcón.
En el taller está imponente la estatua de
Atahualpa con el brazo levantado, evocando a la cantidad de oro y plata que
daría a los españoles por su rescate, -imagen reproducida en diferentes tamaños
y tipos de piedra, como el granito que lo traen desde el km 22, cuarzo, mármol,
piedra azul y la marmolina, traída desde la provincia de San Pablo-. También
una enorme cascada con sirenas y delfines, tallados con cinceles que los mismos
artesanos fabrican.
Estatua de Atahualpa
Huambocancha, es un pequeño pueblo de artesanos picapedreros, que se ubica a
solo 8.5 km de Cajamarca en la carretera que conduce a Bambamarca. Su
cementerio es famoso precisamente porque sus lápidas están talladas en piedra
granito. Allí se luce el arte de picar la piedra que tienen sus habitantes.
20 son las familias
que se dedican a trabajar la piedra y transformarlas en verdaderas obras de
arte que son muy apreciadas en Europa y EEUU. Desde grandes piletas para jardines hasta pequeños llaveros con
delfines y búhos, se pueden encontrar en ésta localidad. No descuidan ningún detalle,
joyeros, roperos, volquetes, camiones y maquinarias pesada hechos a base de
piedra.
Datos importantes:
Desde Cajamarca hay combis que
van a Porcón.
El cementerio San Francisco de Huambocancha, se encuentra antes de los artesanos en la misma carretera.
Tiene aprox. 300 lápidas hechas
de granito, allí se muestran el arte de su gente y con motivos católicos,
talladas en piedra de cantería con fachadas de iglesias en miniatura, de
distintos y cálidos colores.
Agradecimientos:
Fotos y Textos @ElizabethGonzalezTapia